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ANTECEDENTES

El dato
El nivel de esfuerzo en materia de I+D del agregado de regiones que componen el SUDOE se sitúa en torno al 1%, aproximadamente la mitad de los niveles medios de la Unión y muy lejos del nivel del 3% fijado en los objetivos de Lisboa para 2010

El análisis
A pesar de los esfuerzos realizados, y de los avances logrados, el nivel de inversión en I+D+i en el espacio SUDOE no es todavía el suficiente, y los niveles de productividad son inferiores a la media comunitaria.

Esto es debido a diversas causas, entre las que se pueden destacar:

-La preponderancia de sectores tradicionales y con poco contenido tecnológico
-El gasto en I+D de los agentes privados menor al deseado
-La relación entre los centros de investigación y las empresas sigue siendo débil. Hay una insuficiente transferencia de tecnología hacia la pyme

Además este hecho se ve agravado por la pérdida de competitividad por la entrada de los PECO; y por la crisis económica, que ha hecho que las empresas reduzcan sus inversiones en las actividades que conllevan un mayor riesgo, como es el caso de la I+D. Sin embargo no todos los datos son negativos, ha habido un crecimiento significativo en el personal empleado en I+D; las empresas son cada vez más conscientes de la relevancia de esta actividad como elemento clave para la supervivencia en un mercado cada vez más competitivo; y las políticas nacionales en I+D+i se acercan cada vez más a las necesidades de las pymes.

El sector agroalimentario es uno de los sectores productivos más importantes de la región SUDOE (Sudoeste Europeo).

El tejido empresarial de este sector es complejo, tiene una gran variedad de subsectores, y el 96% de las empresas son pymes, que encuentran una gran variedad de dificultades a la hora de innovar y hacer I+D.


Por la importancia del sector, es necesario lleva a cabo acciones concretas para conseguir que haya más pymes agroalimentarias que incorporen la innovación en su estrategia y procesos, que participen más activamente en los programas de I+D+i, y estrechen las relaciones con los organismos de investigación, de tal manera que haya una transferencia de tecnología más efectiva.

A partir de esta problemática detectada, surge la idea de seleccionar y tutorizar a un grupo de pymes de estas características.


Y por la región en cuestión, y su relación con la dieta Mediterránea, se ha identificado además como campo de actuación la “Alimentación y Salud”. Dentro de este campo el proyecto se centrará en la reducción/sustitución de grasas, azúcares, aditivos y sal. De esta forma, el proyecto persigue aumentar el nº de pymes del sector agroalimentario con actividad en I+D+i.